Paso de gigante para conseguir el objetivo de repatriar los restos de Rafael Altamira y su esposa, Pilar Redondo, desde el cementerio de México DF en el que reposan hasta el camposanto de El Campello. El apoyo institucional materializado hoy por la Generalitat Valenciana, que ya ha dispuesto fondos económicos para sumarse a la financiación de la operación, supone de facto una garantía inequívoca de que, pasados 73 años de su fallecimiento, el humanista, jurista y literato realizará por fin el viaje de regreso a su país, España, y más concretamente “al rincón de mis amores más gratos: Campello”, como declaró en una entrevista periodística anunciando su deseo una vez alcanzada la jubilación.

El apoyo de las instituciones públicas ha sido máximo, y a todos los niveles. El actual presidente de la Generalitat se comprometió en octubre de 2022, siendo presidente de la Diputación Provincial de Alicante, a respaldar la repatriación “hasta donde haga falta”. Lo hizo en una visita oficial que le hizo el alcalde de El Campello, Juanjo Berenguer, que le anunció al hoy presidente de los valencianos que los trámites burocráticos (que han sido muchos y tediosos), estaban en marcha, siempre contando con la colaboración de la familia Altamira.

Desde entonces, tanto Diputación como Generalitat han sido puntualmente informados de los pormenores de la operación, los contactos hechos ante la embajada española en México y la embajada mexicana en España, una empresa funeraria especializada en este tipo de traslados, y la familia del jurista, que respalda sin fisuras que sus antepasados vuelvan a España.

Con este respaldo, los cuatro niveles de la administración pública se han comprometido con la repatriación: local, provincial, autonómico y nacional. El objetivo de Juanjo Berenguer es que se sumen también instituciones de nivel académico, jurista, cultural, social y científico, “hasta conseguir que este asunto se convierta en un tema de interés general”, señala el primer edil.

“Sin el apoyo recibido ya formalmente de Carlos Mazón desde la Generalitat, al que sin la menor duda se sumará la Diputación que ahora preside Toni Pérez, hubiera resultado muy difícil la repatriación de los cuerpos, que ya podemos dar por hecha”, enfatiza Juanjo Berenguer.